¿Son necesarios los castigos?
¿Son necesarios los castigos?
¿Ustedes realmente creen que una persona que aprende algo, debe recibir una sanción cuando comete un error o no la cumple a cabalidad? Imagínese que está en un nuevo trabajo, donde le están capacitando para manejar un nuevo sistema operativo y usted comete uno o varios errores en este aprendizaje, ¿qué sucedería si por cada error, se le impone una sanción, un castigo o una reprimenda? ¿Usted cree que esto lo motiva? Usted cree que esto lo invita a querer volver a intentarlo? Lo mas probable es que no… nos gusta que se respete nuestro ritmo de aprendizaje y nos da seguridad contar con un jefe, o colega que tenga paciencia y lo haga con respeto y claridad.
Pues eso mismo sucede con los niños, la diferencia es que ellos están aprendiendo todos los días algo nuevo, quizás tienen que integrar varios aprendizajes al día, porque están en etapa de maduración, crecimiento y aprendizaje.
Entonces ¿qué hacer cuando queremos guiar a nuestros hijos en el proceso de enseñanza?
Ser consciente que su papel como padre o madre es ser el maestro que enseña, no el supervisor que observa para recalcar el mínimo error del niño.
Tenga un enfoque basado en soluciones, reflexione con el niño sobre las decisiones inapropiadas que pudo haber tomado. Evite palabras destructivas como: eres un malcriado, estas sordo, no sabes escuchar, etc.
Busque soluciones coherentes con la edad del niño.
Olvide los errores pasados y no los traiga a colación cada vez que suceda un nuevo error en el niño.
Haga a su hijo responsable por su comportamiento. Permita que tenga frustraciones como consecuencia de sus acciones, él necesita este tipo de experiencias para desarrollar su propia creatividad al resolver situaciones complejas.
Si usted acompaña amorosa y respetuosamente a su hijo en este proceso de aprendizaje, él será un niño mejor comportado y más feliz.
La forma en que usted maneje las frustraciones que su hijo le genere, será la MISMA forma en la que su hijo resolverá sus propios conflictos que se le presenten en su propia vida.